- El incremento de capacidad de generación eléctrica renovable durante 2023 ha sido 4 veces inferior al de 2022, según el último informe de OBERCAT.
- Tras la nuclear, la segunda fuente de abastecimiento de electricidad fueron las importaciones, que casi se doblaron respecto a 2022 llegando a cubrir un 14,2% de la demanda eléctrica.
- La eólica ha sido la energía renovable con una mayor cobertura de la demanda durante 2023, llegando al 7%, mientras que la fotovoltaica (sin autoconsumo) no llega al 1%.
- Sin embargo, el incremento del autoconsumo y la mejora de la eficiencia y el ahorro también han permitido reducir la demanda eléctrica en un 0.9% respecto a 2022.
El Observatorio de las Energías Renovables en Cataluña ha presentado esta mañana el resumen ejecutivo del informe de situación de 2023 del progreso de la implantación de energías renovables en Cataluña en el Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña. El informe revela que el incremento de capacidad de generación eléctrica renovable durante 2023 ha sido de 34,39 MW, casi cuatro veces menos que en 2022. Una desaceleración en la capacidad de generación que ha disparado las importaciones de electricidad, las que se han doblado respecto a 2022 llegando a cubrir un 14,2% de la demanda eléctrica. Sin embargo, el incremento del autoconsumo y la mejora de la eficiencia y el ahorro energético han permitido reducir la demanda eléctrica en un 0.9% respecto a 2022.
Según los datos del informe, la demanda eléctrica se ha cubierto, principalmente, con energía nuclear en un 50,7%, dos puntos menos que el año anterior (53,3%). Los reactores nucleares de Catalunya, que empezarán a desconectarse en octubre del 2030, han aportado siete veces lo que han aportado los parques eólicos, nueve veces lo que ha aportado la energía hidráulica y más de 55 veces lo que la energía solar fotovoltaica.
Por su parte, las importaciones han sido la segunda fuente de abastecimiento de electricidad de Catalunya. Pese a la ligera disminución de la demanda eléctrica, la caída de la generación hidráulica, la nuclear y la quema gas fósil han requerido aumentar muy notablemente las importaciones de electricidad, que han cubierto el 14,2% de la demanda eléctrica, comparado con el 8,1% en 2022.
Los redactores del informe señalan que el incremento de la capacidad de generación renovable del sistema peninsular obliga a modular la nuclear y reducir la de los ciclos combinados. Algo que se traduce en unas importaciones al sistema eléctrico catalán de casi el doble que en 2022. En datos de 2023, el saldo importador de Cataluña es de 6.266,56 GWh y el saldo exportador de Aragón es de 12.211,98 GWh , algo que, según afirman, evidencia que la transición energética de Cataluña proviene de los intercambios de energía y que puede convertirse en tendencia en los próximos años, si no se alcanzan los hitos marcados.
En este sentido, y con la desconexión de 1 GW nuclear en 2030, OBERCat pide a través de este informe revertir al máximo el déficit de generación renovable en Cataluña en estos seis años con la implantación de generación renovable de alta capacidad, o incrementar el número de MAT conectadas con los territorios vecinos para proveer a Cataluña con sus excedentes de generación renovable.
En tercer lugar, la demanda eléctrica en Cataluña se ha cubierto con ciclos combinados con una cobertura del 13% de la demanda eléctrica, lo que representa una caída del 26,5% respecto a 2022. Las instalaciones de cogeneración, que también queman gas fósil, son la cuarta fuente y un 8% del total. En total, el gas fósil quemado ha aportado 9,4 TWh, cubriendo en un 21,4% la demanda eléctrica de Catalunya, un 16,8% respecto al año anterior.
En cuanto a las fuentes renovables, como novedad en 2023, la eólica se posiciona como la más importante, con 3 TWh y ha cubierto 7% de la demanda eléctrica, aportando un 25,3% más que en 2022. Sigue la hidroeléctrica cubriendo un 5% de la demanda, un 17,6% menos que el año anterior por el impacto de la sequía. Cabe decir que es la aportación más baja de la energía hidroeléctrica en Cataluña desde 1990. Las centrales hidroeléctricas han cubierto 2.205,31 GWh, representando el 5,8% de la generación, comparado con el 6,4% el año 2022.
La solar fotovoltaica, sin contar con el autoconsumo, ha cubierto un 1% de la demanda, un 3,8% más que el año anterior. El resto de tecnologías de generación –turbinado del bombeo, residuos no renovables, residuos renovables (sólidos urbanos), biogás, solar térmica, biomasa y residuos diversos– han aportado 790,63 GWh, cubriendo el 2% de la demanda eléctrica.
Ante la emergencia climática, la tramitación sigue siendo un embudo
La Prospectiva Energética de Cataluña 2050 (PROENCAT 2050), la hoja de ruta de la transición energética aprobada en 2023, fija que en el año 2030 el 50% de la demanda eléctrica de Cataluña debe cubrirse con fuentes renovables y la totalidad de la demanda energética en 2050. En 2023 la cobertura de la demanda eléctrica de Cataluña con renovables ha sido del 13,6%, un 0,6% más que en 2022. Según los redactores del informe, habrá que multiplicar por cinco la capacidad de generación eléctrica renovable actual para alcanzar la meta de 2030 y para veintidós la meta de 2050.
En Cataluña, desde la aprobación del DL 16/2019, se estima una cartera potencial de 176 proyectos eólicos presentados y pendientes de tramitación, con 6,75 GW de potencia, y 750 proyectos solares fotovoltaicos sobre terreno con una capacidad de 9 ,07 GWn de potencia. Comparando con datos del año anterior, el informe identifica un colapso de proyectos en tramitación superior del 22,9% en fotovoltaica y del 2,2% en eólica.
En este sentido, los redactores del informe creen que el mecanismo empleado por la administración para cubrir la necesidad de profesionales para impulsar la tramitación de renovables se ha mostrado débil y provisional. Tal y como indican en el informe, se han contratado a las personas a partir de un programa temporal de duración trienal, sin consolidar posteriormente estas plazas. El resultado, dicen, es una pérdida inmediata de capacidad para tramitar del Govern, además de conocimiento y experiencia.
La necesidad de liderazgo política en la transición energética
Con los datos recogidos en el informe, OBERCat urge acelerar la implantación de renovables para salir del vagón de cola de Europa. Por este motivo, propone que desde la presidencia del nuevo gobierno de la Generalidad de Cataluña se lidere de "forma decidida" la transición energética como una herramienta imprescindible de lucha contra el cambio climático, aprovechando las sinergias sociales, medioambientales y económicas derivadas de ésta aporta decidida.
En este sentido, también creen que es “imprescindible un Departamento de Transición Ecológica, en el que la transición energética sea prioritario para la persona al frente del departamento y con una Secretaría General de Energía, con capacidad para impulsar la descarbonización, con la colaboración de otras áreas, pero sin supeditar las políticas energéticas.”
Autoconsumo y almacenamiento tras el contador
Según recoge el informe, el autoconsumo fotovoltaico ha continuado avanzando, aunque desde el segundo semestre de 2023 y el primer trimestre de 2024 experimenta una desaceleración notoria, por la caída de los precios de la energía, la subida de los tipos de interés y la no resolución y finalización de los fondos NextGeneration.
En 2023 se han puesto en servicio 42.004 instalaciones solares fotovoltaicas de autoproducción con consumo directo (autoconsumo) con una capacidad de 436,81 MW, un 185% más en 2022. Cataluña se ha situado así con casi 1GW de potencia de autoconsumo fotovoltaico, siendo líder en el estado en cuanto a potencia instalada con un 14% del total. Por el contrario, durante 2023 el número de proyectos de autoconsumo ha sufrido una contracción de la demanda de entre el 25% y el 50% que tendrá un impacto en el número de instalaciones realizadas durante el ejercicio 2024.
Se estima que el autoconsumo solar fotovoltaico en Cataluña ha supuesto una reducción de la demanda eléctrica de 1,8% en 2023, casi un punto más que en 2022, que fue del 0,9%. Sin embargo, tal y como argumentan los autores del informe, el autoconsumo solar fotovoltaico acumulado en Cataluña ha supuesto una inversión privada, de particulares y empresas, de cerca de 1.200 millones de euros, lo que constata nuevamente “la lentitud con las que las administraciones distribuyen las ayudas comprometidas, acumulando retrasos injustificables de más de dos años”.