La eólica marina flotante es una de las energías renovables más prometedoras tanto en Cataluña como en el resto del estado. En este sentido, la Plataforma de I+D+i en Energías Marinas de Cataluña (PLEMCAT), liderada por el Instituto de Investigación en Energía de Cataluña (IREC), se ha erigido como una de las principales iniciativas para impulsarla. En esta entrevista con el clúster, el responsable de investigación en eólica marina del IREC, José Luis Domínguez, habla sobre algunos de los retos y oportunidades asociados al desarrollo de esta tecnología en Cataluña, destacando el impacto económico y social a corto y largo plazo.
¿Por qué se decide apostar por la eólica marina flotante?
En Cataluña, como en el resto de la península, se trata solo de eólica marina flotante debido a que las profundidades que tenemos en nuestros mares a distancias cortas de la costa ya son elevadas (más de 100 m a menos de 15 km). La eólica flotante incluye la turbina/aerogenerador, como en el caso de la fija en tierra, pero en lugar de una cimentación directa en el suelo, esta queda anclada a través de anclajes al fondo marino y un flotador que la sostiene. Estos proyectos tienden a ser de gran potencia, ya que siempre se busca minimizar la necesidad de infraestructura de evacuación (cable eléctrico) y los impactos en el territorio. De esta manera, se requieren menos obras y se optimiza el proceso.
¿Qué impacto puede tener en la transición energética en Cataluña?
Si revisamos el POEM y el PROENCAT2050, la eólica flotante debe aportar entre 1 y 3 GW en la zona; esto representa un porcentaje muy elevado de la demanda eléctrica de la provincia de Girona, que actualmente presenta un déficit muy grande. Esto significa que sería un gran avance para la transición energética de las comarcas.
La PLEMCAT, que lidera el IREC, tendrá un papel clave.
Sí, ahora estamos en proceso de tramitación y, en paralelo, avanzando en los proyectos de diseño y construcción. Y tenemos un gran reto, que es poder estar operativos en 2026.
¿Qué se espera de los prototipos de eólica marina flotante que se quieren instalar allí?
El objetivo de PLEMCAT no es solo instalar y ensayar los prototipos de eólica flotante, aunque es la parte más visible; también estamos sensorizando la zona para recibir y conocer datos climáticos, biológicos, entre otros, para poder identificar los posibles impactos de la implantación en el área y también el cambio climático. En cuanto a los prototipos, se espera validar su comportamiento, que la flotabilidad sea correcta, que puedan resistir, por ejemplo, tormentas, y que no haya elementos o componentes que reciban más cargas de las estimadas durante su operación. Porque el comportamiento en operación real y en condiciones reales permite realizar validaciones de manera adecuada, identificando posibles mejoras y minimizando riesgos. Así que, en resumen, lo que esperamos es obtener conocimiento para acelerar la transición y hacer que esta tecnología sea una realidad.
¿Cuáles son los principales retos técnicos de esta tecnología?
El principal reto es demostrar la madurez de la tecnología como tal, ya que en todo el mundo todavía hay muy poca implantación real y muchos conceptos en desarrollo. Pero es importante destacar que el Mediterráneo presenta unas condiciones marítimas muy buenas, con olas pequeñas y buen viento. El único problema es la profundidad, que es muy elevada a poca distancia de tierra firme, lo que obliga a anclar los aerogeneradores a grandes profundidades.
La eólica marina en Cataluña tiene un gran potencial, pero también ha generado cierta controversia.
Por definición, las energías renovables sirven como herramienta de preservación del medio ambiente y de las comunidades locales, ya que permiten luchar contra el impacto del cambio climático, que es el gran enemigo del medio ambiente. Pero también se puede entender que la gente tenga dudas sobre una tecnología desconocida que pueda generar inquietud. Por eso, PLEMCAT es muy importante, ya que quiere proveer información, conocimiento y certezas sobre los impactos del cambio climático y de la energía eólica en la zona. También es muy importante destacar que los proyectos de renovables deben desarrollar y cumplir con un estudio de impacto ambiental (según la normativa) en el que se deben analizar los impactos que pueden producir, las medidas de mitigación que se presentan (en caso de tener algún impacto) y las herramientas de seguimiento y vigilancia ambiental correspondientes. En cuanto a las comunidades locales, es importante entender que para funcionar únicamente con renovables necesitamos más instalaciones de autoconsumo, pero también grandes instalaciones de generación, porque los tejados no pueden cubrir la demanda de todos los vecinos de un edificio, y es necesario sustituir las actuales plantas de gas, cogeneración y las nucleares.
¿Crees que la llegada de PLEMCAT puede facilitar la creación de proyectos de eólica y eólica marina flotante en la zona?
No sabría decir si lo facilitará o no, pero sí dará certeza a los mensajes y puede proporcionar información relevante sobre aspectos a mejorar o corregir para su implantación en el territorio. El objetivo de PLEMCAT es que sirva como una herramienta de decisión, aprendizaje, mejora y para hacer recomendaciones.
¿Qué impacto económico podrían tener los parques eólicos marinos para la industria y el empleo en Cataluña?
Hay estudios que hablan de un impacto muy elevado. Según informes sobre el potencial de implantación de la eólica marina en la península, podríamos estar hablando de más de 5000 empleos -3000 directos y 2500 indirectos- solo en Cataluña. Además, habría que crear una cadena de valor en torno a la construcción, mantenimiento, operación, entre otros. Lo que llevaría a un crecimiento alrededor de esta tecnología en las áreas de desarrollo.
Y eso que aún es una tecnología con mucho potencial de desarrollo…
Actualmente, hay 3 parques demostrativos en operación en todo el mundo (en Portugal y Escocia); y hay prototipos en Francia y Noruega, y en España, en el País Vasco y Canarias. Tratándose de una tecnología en desarrollo, todos estamos aprendiendo de todos, pero es importante destacar que en Cataluña tenemos un nodo de conocimiento e innovación muy avanzado en este campo.
¿Qué otros proyectos tenéis en marcha en el ámbito de la energía eólica marina flotante y otras fuentes de energía marina?
En el IREC trabajamos en la eólica flotante desde hace mucho tiempo, y nos enfocamos en técnicas de optimización de generación (obtener más energía de los parques), aumentar su vida útil mediante la digitalización y control avanzado, optimización de la ubicación de las turbinas y también mejorar los sistemas de fijación de la eólica flotante. También es importante destacar que en el IREC hemos trabajado en el control de tecnologías de olas, analizado potenciales ubicaciones; y estamos trabajando en la implementación de la tecnología de energía solar flotante marina, que presenta retos muy interesantes debido a las dinámicas de las olas sobre los módulos.
Actualmente, la eólica es una de las renovables que más está creciendo. ¿Cuál es su techo en Cataluña?
La eólica debe llegar a ser una de las fuentes de generación dominantes, junto con la solar, en Cataluña. Según el informe PROENCAT2050, para 2050 Cataluña podría disponer de 25 GW de potencia de energía eólica, lo que implica un crecimiento muy grande respecto al escenario actual.
¿Cuál es tu visión sobre la capacidad del territorio para alcanzar los objetivos de renovables para 2030?
Creo que todos debemos remar en la misma dirección. El territorio tiene la capacidad y los recursos, pero para eso es necesario llegar a acuerdos y avanzar; y actualmente, a veces parece que dar el primer paso es complicado, porque implica cambiar de una situación estática conocida a una dinámica que puede ser diferente.